Satsuma - Marisol - Arrufatina - Oroval - Clemenules - Hernandina - Clemenvilla - Ellendale - Ortanique

¡Qué dulce eres!

Las Clementinas son una de las variedades de fruta preferidas de la temporada de invierno. Pertenecen a la familia de las mandarinas, que vienen originariamente de China y que fueron introducidas en Europa el siglo XIX. Estas llamadas "easy peeler" (fáciles de pelar) convencen por ser un sencillo placer: es muy fácil pelarlas y, de entre el resto de cítricos, las clementinas son los más dulces.

Las mandarinas se dividen en 3 grupos principales: Satsumas, Clementinas e Híbridos. La temporada empieza a mediados de septiembre con las primeras Satsumas. Para tobsine, estas frutas no suelen ser suficientemente dulces; por esta razón, esperamos hasta octubre para empezar con la temporada de las Clementinas. 

En noviembre se da el pistoletazo de salida a la "variedad reina", las Clemenules. Esta variedad se caracteriza por un excelente sabor, un aspecto inmejorable y porque los frutos pueden pelarse muy fácilmente. Desde la época de cosecha hasta enero, la Clemenules, que es una mutación de la ya prácticamente desaparecida Clementina fina, es la variedad de Clementina más importante y significativa en lo que se refiere a volumen. 

Existen otras variedades que pueden agregarse a las Clementinas, pero no son tan importantes en cuanto a volumen. Se trata de las Orovales, Arrufatina, Pons, Oronules y la Hernandina. La mayoría de las veces el consumidor desconoce esta variedad de clases, ya que en los puntos de venta solamente se lee "Clementinas".

Paralelamente a las Clemenules, en diciembre y enero todavía se cosecha una variedad de híbrido bajo la marca de tobsine: la Clemenvilla. Es un sabroso híbrido entre naranja y mandarina. Para tobsine, la temporada de las Clementinas finaliza a principios de abril con los híbridos Fortuna y Ortanique.